Ante del espectáculo, los críticos de artes Odalis Pérez, Kerenia Guillarón, Myrna Guerrero y Marianne de Tolentino hablaran con el público presente de los conflictos y destrezas en la práctica curatorial hoy, y tendrá como moderador a Carlos Acero.
SANTO DOMINGO. Como lo prometió el Comité Organizador de la 25 Bienal Nacional de Artes Visuales, el cierre de esta gran fiesta de las Bellas Artes será dedicado a la música de la nueva trova, a los ritmos originales dominicanos, en particular lo afro y la religiosidad popular dominicana y al Jazz, y que Xiomara Fortuna convertirá en una Noche de Fusión.
Las informaciones fueron suministradas por la licenciada María Elena Ditren, directora de la institución cultural, dependencia de la Secretaría de Estado de Cultura, que desde el pasado 16 de agosto ha estado presentando a casa llena un amplio calendario de actividades artísticas, coloquios, conferencia, panel, charlas y visitas guiadas.
El Concierto pautado para este viernes 13 de noviembre a las 8:00 de la noche en la explanada frontal de la institución cultural será dedicada a los artistas plásticos participantes en esta versión numero 25 de la fiesta más importante del arte dominicano.
Ante del espectáculo, los críticos de artes Odalis Pérez, Kerenia Guillarón, Myrna Guerrero y Marianne de Tolentino hablaran con el público presente de los conflictos y destrezas en la práctica curatorial hoy, y tendrá como moderador a Carlos Acero.
Un poco de Xiomara Fortuna, cantante y compositora
Nació en 1959 en Montecristi, región noroeste de la República Dominicana, un lugar próximo al mar, salobre, y muy cercano a la frontera con Haití. A los doce años de edad entra en el arte, dedicando sus primeros años al teatro. Desde 1978 trabaja como cantante y compositora. Desde hace más de dos décadas, XF vive en la ciudad de Santo Domingo, donde es una figura imprescindible en el paisaje artístico y desde una vida cotidiana muy apacible, genera los elementos de una intensa vida artística, en continuo proceso de creación.
Estudió Arte en la Universidad Autónoma de Santo Domingo pero no concluyó sus estudios por la inquietud de encontrar lo que está más allá de las aulas y los libros. Puede calificarse como autodidacta en el aprendizaje musical, a pesar de que recibió la influencia y tutoría de destacas figuras de la música, el canto y la literatura dominicana.
Su carrera artística puede dividirse en tres etapas importantes:
En la primera etapa, finales de los años setenta y primera mitad de los ochenta, forma parte del movimiento de la canción comprometida o nueva trova, es representante de la última generación de este género. Compone y hace letras llenas de compromiso social. En esta etapa participó en eventos de solidaridad y apoyó con su canto los procesos de los pueblos de Cuba y Nicaragua, llegando a visitar estos países frecuentemente y entablando contacto con grandes autores de este genero de los cuales recibió influencias en su sensibilidad social, como Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa, Patxi Andion, Joan Manuel Serrat.
En una segunda etapa, la más breve, a mediados de los ochenta, su carrera se orienta a la investigación de ritmos originales dominicanos, en particular lo afro y la religiosidad popular dominicana. En este periodo se dedicó al folklore dominicano y de ahí salió un disco titulado "De la loma al llano". Que si bien recoge textos y letras producidos por mujeres campesinas de toda la geografía dominicana, en la musicalización se atisba el inicio de la fusión de los ritmos tradicionales dominicanos con el jazz y otras músicas.
En la última mitad de los ochenta empieza a incursionar en el Jazz,. Conoce al compositor y jazzista dominicano Toni Vicioso quien le introduce en un universo musical más amplio y empieza a componer para la artista temas de este genero. Muchas veces enmarcándose en el Latín Jazz y en ocasiones haciendo un más un Jazz mas étnico. De esta unión nace "Kaliumbe" y la fusión. En la actualidad Xiomara sigue trabajando con este grupo. De esta etapa de colaboración surgen cosas muy ricas e importantes para la música dominicana. A partir de ahí y de las experiencias adquiridas en los tres momentos anteriores, decide dedicarse a la fusión. Toni Vicioso se radica en Nueva York y Xiomara Fortuna queda al frente del grupo, desde entonces se dedica a componer y a definir esta propuesta musical.
Caribbean Ethnic Jazz o Fusión Caribeña
En sus actuaciones a nivel internacional, concretamente en París, donde se ha presentado periódicamente en los años noventa, se le coloca bajo la etiqueta musical de Caribbean Ethnic Jazz. Ella prefiere denominar su trabajo como Fusión Caribeña, porque aunque tiene una visión que parte claramente del Jazz, se fusionan otros ritmos, algunos poco usados en la música popular, como esos que acompañan la religiosidad afrocaribeña: congo sarandunga, petró, y otros mas conocidos: merengue, son, samba, reggae, etc. Todo para crear un concepto nuevo, donde la armonía y lo rítmico pueden coincidir. El resultado es una música dinámica, rítmica, armoniosa que aporta una nota muy original e innovadora en la inmensa gama de músicas afro-caribeñas.
Autora y compositora, sus letras se inspiran en las raíces negras y mestizas de toda la Isla de Santo Domingo. Sus temas hablan de la como cantante su voz grave, enérgica y dulce no necesita explicación, ni comparación. Maurice Cullaz, de DEJAZET -club más antiguo de Jazz de París, ha manifestado que "sin lugar a dudas es la voz del Jazz en español", es en todo caso una de las mejores voces negras del Caribe hispano.
Los viajes han sido múltiples e importantes en su carrera artística, con presentaciones en el exterior en diversos puntos de América Latina: Brasil, México, Centroamérica, en Estados Unidos y Europa: Francia, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Italia, España. También los viajes por el interior de la Isla Santo Domingo, aprendiendo en todos sus rincones. Esto ha sido materia fundamental de enriquecimiento para el viaje mas importante, el interior, por la madurez de su ser como mujer, artista.
